lunes, 8 de diciembre de 2008

No juzgues y no serás juzgado

Bien, como éstas semanas he estado hasta arriba de trabajos, y el más laborioso ha sido sobre prostitución y marginación, dejo la canción que pusimos para cerrar la exposición, porque hacer un resumen del powerpoint sería demasiado extenso:

Con el permiso de quien lo hiciera antes
permítanme el poema que estoy cantando
que no es un desafío, que es solo un canto
a una mujer que siempre defendí bastante

Permítanme el poema a las prostitutas
un modo de mujer como otro cualquiera
mi madre no lo es pero si lo fuera
no me avergonzaría ser hijo de puta.

Conozco a más de una fulana que ha sido una puta
pero no he conocido una puta que haya sido fulana.

A las putas que yo he conocido han sido señoras
que en menos de media hora, con cariño, condón y ternura
han cobrado su cama más barata que fulanas que presumen de señoras.

No me gusta que mujeres cobren a los hombres pobres de amor y cariño,
ni me gusta hombres que les paguen a mujeres pobres de amor y dinero.

Y a esos hombres como a esas mujeres qué les importará lo que les diga yo
si yo soy más joven que una virgen y una prostituta es más vieja que yo.

Que el cariño que es tan caro y tan profundo,
si una mujer necesitada te lo da por casi nada es porque es
la más honrada del mundo.


No hay comentarios: