sábado, 31 de marzo de 2012

Años de plomo y fuego

Parece ser que ésta semana pasada ha sido políticamente más intensa que cualquier otra del año. Sí es verdad que "por culpa" de mi estancia en Madrid he estado un poco más ausente, aunque eso no quita que haya asistido a otro tipo de movilizaciones donde no me pueden decir que "la juventud es un caso perdido", porque me he encontrado con gente que rebosa inteligencia.

Comenzando por las elecciones al Parlamento Andaluz del domingo 25, creo que más de un@ se ha llevado una sorpresa desagradable. Cuando digo más de un@ me refiero tanto a PSOE como a PP. Estos últimos estaban demasiado convencidos de que conseguirían la Junta por mayoría absoluta, tal y como se creía en 1996. Han conseguido mayoría simple, pero PSOE también ha tenido una amarga derrota, por mucho que hablen de "la dulce derrota". Sí, ahora, por una vez, Izquierda Unida tiene la llave para dar el gobierno a una u otra parte, e incluso para volver a convocar elecciones.

Por supuesto que no soy partidario de que gobierne el PP; Dios me libre, pero tampoco soy partidario de otro gobierno más del PSOE desde su perspectiva socialdemócrata-autoritaria y corrupta con la que nos han "premiado" estos 30 años. ¿Mi postura? Investir a Griñán como presidente, y que IU y PP pasen a la oposición. Eso sí, tal y como dice Julio Anguita, la investidura tiene un precio. Si el PSOE se dice de izquierdas, tendrá que comprometerse a gobernar desde la izquierda si quieren nuestro apoyo. Me opongo a cualquier pacto de gobierno en coalición.

Sobre la huelga general del 29-M, tendría mucho y poco que decir a la vez. He de reconocer que me estuve preparando para vivirla en Madrid, ya que tenía mi billete de AVE comprado para ese día, desde hacía meses antes de convocar la huelga, además de haber estado acudiendo tanto a las reuniones de preparación del Área de Juventud de Izquierda Unida de la Comunidad de Madrid y del Campus de Somosaguas, y a las de Juventud Sin Futuro. Pero iban a ser demasiados acontecimientos importantes lejos de mis compañer@s de lucha.

Mi idea no había sido la de ir con ningún sindicato, pues con mucha gente he hablado que, desde la anterior huelga del 29-S en 2010, tras toda una jornada de piquete, los sindicatos firmasen un acuerdo con el gobierno que perjudicaba a los trabajadores, los sindicatos perdieron mi confianza, y siguen sin ganarla. Pero Dos Hermanas tampoco es tan grande como para elegir grupo de piquetes...y también hay que reconocer que CCOO tiene su sector crítico.

Después de 12 horas de piquete INFORMATIVO, habría mucho que reflejar. Lo primero es recalcar eso: informativo. No escuché ningún tipo de insulto por parte de nuestros piquetes, ni acciones delictivas. De haber sido así, hubiese sido el primero en reprobar la actitud e irme de allí. Estuvimos en varias fábricas, como la conocida Ybarra, donde la policía de paisano nos seguía de forma descarada, con actitud chulesca y porras escondidas a sus espaldas. Allí entraron varios trabajadores insultando; es decir, ellos, por si acaso, llegaron con insultos y "enseñando el dedo" como ya se pueden imaginar.

Lo mismo pasó en la esquina de Mercadona, donde los coches pasaban insultándonos a voces, y eso que estábamos encima del acerado sin interrupir ni el paso del tráfico ni el de peatones.

Se nos acusó de haber hecho pintadas en el bar Baker Street, cuando sabíamos que secundaría la huelga y no se nos hubiese ocurrido...Total...que se ha demostrado que teníamos un contrapiquete haciendo de las suyas.

¿Mi valoración? Sinceramente, pena. Personas que se podían permitir ese día de huelga (porque hay otras que comprendo que no pudiesen), y que se consideran de izquierdas, echándonos tierra encima. Personas de mi sector social, además de trabajando, juzgándome como "piquete violento", conociendo bien mi actitud pacífica y sin ningún tipo de pruebas...Creo que el pueblo está adormilado. Y ahora que se han aprobado tantos miles de millones de euros de recortes...¿también les da igual?

No hay comentarios: